Primero quítale la piel al pollo y la grasa, salpimenta los muslitos.
En un caldero chato o en una paellera si lo prefieres, pon un poco de aceite y fríe el pollo a fuego fuerte, hasta que esté bien dorado por todos lados. Retira el pollo y lo reservas.
En el mismo aceite de freír el pollo*, sofríe primero los ajos picaditos, sólo hasta que cojan color, luego añade la cebolla y el pimiento troceados y sofríe a fuego suave hasta que estén blandos. Añade entonces los tomates pelados y cortados en trocitos o tomate natural triturado y cocina hasta que la fritura espese.
Una vez tienes la fritura en su punto añade una cucharadita de pimentón y rehoga durante medio minuto sin dejar de remover.
Añade entonces la zanahoria pelada y cortada en cuadraditos pequeños y las habichuelas cortadas en trozos de unos 2 centímetros de largo (más o menos) y rehoga las verduras un par de minutos.
Añade ahora el pollo y el arroz y rehoga de nuevo todo para que el arroz se impregne de la fritura.
Vierte el caldo o el agua, remueve bien todo y añade las hebras de azafrán y sal al gusto, si quieres puedes añadir un pizca de colorante amarillo también. Sube el fuego al máximo hasta que empiece a hervir, ahora puedes añadir los guisantes congelados y espera a que arranque de nuevo a hervir.
Ahora baja el fuego un poco, el arroz bomba tarda unos 12 o 13 minutos en hacerse, pasado este tiempo comprueba que esté hecho y el punto de sal y retíralo del fuego. Cúbrelo con un paño limpio o con papel de cocina y la tapa del caldero para que repose y termine de hacerse con el calor residual.
Decora por encima con aceitunas y unas tiras de pimiento morrón.